Si alguna vez tu corazón se ha acelerado, has sudado considerablemente, has batallado para respirar, y has sentido que podrías morir en cuestión de minutos, sin razón aparente, lo más seguro es que tienes ansiedad.
Si bien no haré un catálogo de los diversos trastornos derivados de la ansiedad, porque seguramente ya los conoces, es importante retomar el concepto de la misma. Ansiedad es una respuesta normal al estrés, preocupación o amenaza, sin embargo cuando estas sensaciones son severas, de larga duración, o fuera de proporción con las circunstancias, se conoce como un trastorno de ansiedad.
Es decir, que es una especie de energía, que debimos haber gastado en algún punto de nuestra vida, y por alguna razón no lo hicimos. El trabajo, la familia, la imagen social, etc., no permiten que podamos expresar emociones de manera adecuada, o en el peor de los casos, reprimirlas o esconderlas.
Esto hace que esa “energía” se vaya acumulando a través de los días y posteriormente algo hará que se detone alguna crisis de angustia, o esa sensación de estrés constante.
Si bien la ansiedad tiene predisposición genética, y una base biológica, es importante señalar que es multifactorial. El estilo de vida actual, el consumismo, el uso de sustancias como la cafeína, la situación económica, la falta de una cultura de asertividad, entre otros, han convertido la vida en una rueda de la fortuna permanente donde es complicado el manejo apropiado de las emociones, y donde las consecuencias se traducen en inestabilidad emocional.
Y a ti que tienes ansiedad, tengo algunas cosas para decirte:
1.- a pesar de que en una crisis crees que puedes morir porque tu corazón se acelera demasiado y no puedes respirar, no morirás.
2.- un gran porcentaje de la población, sufre de algún tipo de trastorno de ansiedad, así que no eres la única persona.
3.- si bien el medicamento puede ser una gran herramienta (siempre y cuando sea recetado por un médico) las pastillas no solucionan ansiedad que tiene raíz emocional.
4.- la ansiedad es totalmente tratable, y lo más recomendable es la terapia psicológica. Pero también ayuda el ejercicio, un hobby e incluso una mascota.
5.- no tienes por qué cargar con esto solo. Siempre podrás apoyarte de la gente que te ama y con algún profesional de la salud mental, quien te acompañara en el camino para que te sientas mejor y trabajaran las estrategias necesarias para recuperar tu estabilidad emocional y salud mental.
Como puedes ver, a pesar de que haya días donde no sepas que hacer, o creas que esta situación estará siempre molestándote, la ansiedad está dándote alertas para que hagas cambios significativos en tu vida, y estos cambios siempre serán para bien.
Y citando a mi querido compositor y cantante Rick Mar “Mira hacia adelante y no dejes que un instante te destruya por completo, tu eres más que eso”.
Y especialmente a ti, con todo mi cariño y mi corazón, debo decirte, que si no encuentras la manera, aquí estoy yo.